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PAÍS

28 de julio de 2022

Llevaban 105 kilos de cocaína, camuflada en un cargamento de bananas

Cayeron presos, el chofer y su acompañante. Les incautaron, también, dólares y moneda boliviana. Los procedimientos seguirán en Buenos Aires

El personal de Gendarmería Nacional secuestró ayer a la madrugada 105 kilos de cocaína camuflada en un cargamento de bananas, procedente de Bolivia con destino a Buenos Aires, cuyo valor rondaría los U$S 360.000, más de $ 115.000.000 en moneda nacional.

El procedimiento estuvo a cargo del Escuadrón 59 Santiago del Estero, más Seguridad Vial con respaldo de la Sección Núcleo Cronar.

De inmediato, intervinieron el titular del Juzgado Federal Nº 2, Sebastián Argibay, la fiscal, Indiana Garzón y secretaria, Alejandra Gelid.

Todo comenzó cuando un camión Scania semirremolque arribó a la ruta 34 casi 5, kilometro 734, en la balanza de La Tijera, departamento Banda.

Los voceros detallaron que la unidad detuvo la marcha y sus dos ocupantes entregaron la documentación a los gendarmes.

A simple vista, los funcionarios advirtieron una particularidad: el precinto que todo vehículo utiliza para transportar verduras y frutas estaba colocado de manera irregular.

Al momento del control físico y documentológico, los funcionarios detectaron anomalías en el precinto de metal (de Senasa), el cual venía colocado en las compuertas del semirremolque de manera externa.

Al solicitar la presencia del binomio cinotécnico compuesto por el guía y el can “Terra” y al inspeccionar la parte posterior inferior derecho del semirremolque, reaccionó de manera exaltada como lo hace habitualmente frente a la presencia de estupefacientes.

El alerta del can

Fue tan insistente el ladrido del perro que alertó a los gendarmes.

Tal cual lo requieren las normas, se presentaron funcionarios del Senasa, quienes tienen potestad sobre el mantenimiento de la fruta en un transporte.

Por la oscuridad reinante, el vehículo fue trasladado a Gendarmería y continuó el procedimiento casi al amanecer.

Con luz verde judicial, los funcionarios inspeccionaron y escanearon, las frutas.

En menos de 20 minutos, descubrieron 97 paquetes rectangulares de cocaína que arrojó un peso exacto de 105,280 kilos de cocaína.

Para Gendarmería, el cargamento representaría un avalúo total de 115.151.052 de pesos, cerca de 360.000 dólares.

Quedaron detenidos el chofer y su acompañante y les incautaron también U$S 1.251 y 600 pesos bolivianos.

El transporte burló varios controles en la ruta

Antes de arribar a Santiago del Estero, el camión habría pasado por al menos cuatro controles de seguridad, sin que nadie advirtiera la irregularidad en el precinto.

Ello forma parte ahora de la compleja investigación que impulsa el juez Arbigay, quien convirtió el operativo en prioritario, debido al volumen de la carga, deslizó un funcionario.

Al cierre de esta edición, los gendarmes indagaban en posibles otros eslabones en la larga cadena que une al mercado narco con inequívocos lazos de Bolivia y la Argentina.

Aunque nadie lo confirmó, la Justicia santiagueña ayer entrecruzaba información con organismos de Bolivia y de Buenos Aires, última estación para el millonario cargamento, listo para ser entregado a otra facción narco con otra función aún desconocida.


Los detenidos no conocerían a los narcos de Tres de Febrero

Un vocero adelantó que no se descartarían nuevos allanamientos, ya en la provincia de Buenos Aires. La misión ahora es establecer quienes debían recibir la droga y el nuevo destino.

Los dos detenidos se aferraron al silencio y hasta anoche no filtraron nada y por lógica, los otros narcos (a quien es posible que no conocieran) ya debían sospechar que fue secuestrado el cargamento en la ruta.


Puente entre dos provincias

Por lo tanto, durante todo el día la investigación se concentró en el partido Tres de Febrero, pero sin que cayeran los narcos que debían recibir los 105 kilos de cocaína y, de inmediato, tal vez enfriarla.

Bajo un absoluto secreto, la Justicia Federal definía anoche los pasos por dar. Prima facie, el trabajo se concentraba en la hoja de ruta del Scania incautado y los celulares de los dos bolivianos, cuyo contenido los expertos intentaban abrir y conocer.

 

 

Fuente:elliberal

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