Ocurrió en la zona de “El Bajo”. Los registros de las cámaras de seguridad del lugar permitieron capturarlos horas más tarde. El Ministerio Fiscal consiguió que les dictaran prisión preventiva. 

Este miércoles 26 de noviembre se desarrolló una audiencia con el objetivo de formalizar la investigación, formular cargos y pedir medidas de coerción en contra de Claudia Silvana Cáceres (42) y Luis Esteban Barbona (42), una pareja que fue aprehendida el pasado lunes, a las 17:40 horas, sospechados de haber protagonizado en la madrugada un violento episodio en un hotel ubicado en “El Bajo” de la capital tucumana. Dicha aprehensión se concretó por parte de personal policial en la intersección de las avenidas Papa Francisco y Benjamín Aráoz, con parte de los elementos sustraídos.

“Esta investigación se inició a raíz de un hecho ocurrido el lunes 24 de noviembre, a las 05:30 horas, en el hotel Lola Mora, ubicado en calle Crisóstomo Álvarez primera cuadra. Los autores habían ingresado como huéspedes en la noche anterior, a las 22:30 horas, quedando retratados en las cámaras del hotel y en una fotografía que les había tomado la recepcionista, ya que es un lugar donde se alquila por hora y –según lo informado por la víctima– cuando una persona se propone estar más de cuatro horas, les toman una foto o les piden el DNI (ellos no lo tenían)”, sostuvo el auxiliar de fiscal, Nahuel Lencina.

Y agregó: “Ambos imputados maniataron a la víctima, la golpearon y le sustrajeron distintas pertenencias, tanto de ella como del hotel. Pudo ser auxiliada por otros huéspedes y luego llamó al 911, para finalmente hacer la denuncia en la comisaría aportando los videos del hecho”.

A la cárcel

El Ministerio Fiscal les endilgó a los acusados ser presuntos coautores del delito de robo agravado por haberse cometido con el empleo de un arma blanca, en concurso ideal con privación ilegítima de la libertad agravada. En ese sentido y tras detallar las evidencias reunidas hasta el momento, Lencina requirió que se imponga a ambos la prisión preventiva por el plazo de 60 días a los fines de resguardar el proceso y avanzar con el caso. 

“Es un hecho donde los imputados exhibieron una gran violencia en contra de la víctima, al punto tal de que no solo no les bastó con amenazarla y superarla en número y capacidad física, sino que además le exhibieron un arma blanca, se la apoyaron en el cuello, la maniataron, la amordazaron y le echaron alcohol. La víctima, llorando, les suplicó que no continuaran con su accionar”, expresó el representante de la Fiscalía. 

Por su parte, el juez interviniente resolvió avalar todo lo peticionada por el MPF y, en consecuencia, ordenó el inmediato alojamiento en las unidades penitenciarias correspondientes.

El hecho

El último domingo 23 de noviembre, a las 22:30 horas, Barbona y Cáceres se hicieron presentes en el hotel Lola Mora, ubicado en calle Crisóstomo Álvarez primera cuadra (San Miguel de Tucumán), donde una mujer trabaja como recepcionista, e ingresaron como huéspedes alojándose en una habitación del primer piso. A las 05:30 horas, la pareja salió de la habitación, se aproximaron al mostrador donde estaba la víctima y le pidieron una gaseosa. La recepcionista advirtió que los imputados se comportaban extrañamente, por lo que les manifestó que debía revisar sus pertenencias antes de que se retiraran del hotel. 

Ante ello, Cáceres le solicitó un vaso con agua a la mujer, quien se condujo hacia una habitación contigua a traérselo. En ese momento, Cáceres ingresó a dicha habitación y sorprendió a la víctima por la espalda, y la empujó provocando que cayera al suelo y se golpeara la cabeza con la escalera. Seguidamente, Barbona entró en la habitación y junto con la acusada tomaron del cuello a la empleada del hotel y la golpearon en distintas partes del cuerpo, ocasionándole diversas lesiones. Además, le apoyaron un arma blanca en su cuello y le dijeron que si no colaboraba la matarían. 

A continuación, los agresores ataron y amordazaron a la recepcionista con un cinto y una bufanda, la colocaron debajo de una mesada, le rociaron alcohol y la encerraron con un lavarropas. La pareja sustrajo elementos del hotel (una máquina contadora de billetes, la recaudación del día, un televisor y un manojo de llaves) y pertenencias de la víctima (un celular, una mochila, una billetera, llaves de su casa, un par de zapatillas y una campera). Finalmente, ambos se dieron a la fuga con los bienes sustraídos.

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