Viernes 29 de Marzo de 2024

  • 21º

ARGENTINA

23 de enero de 2023

Argentina y Brasil firmarán un acuerdo estratégico por diez años

En su primer viaje internacional, el presidente brasileño aterrizará en Argentina por la noche. Ministros y empresarios lo acompañan para cerrar el ambicioso acuerdo de integración en el que trabajan desde hace meses con el Gobierno. Su agenda en el país

El Gobierno aguarda con expectativa el devenir de las próximas horas: en primer lugar, porque está convencido que el acuerdo que se firmará con Luiz Inacio Lula da Silva, presidente de Brasil, sentará las bases de una nueva alianza bilateral en la que la Argentina tiene mucho por ganar de cara a los próximos años; en segundo lugar, porque la cumbre de la CELAC volverá a mostrar al país en un escenario internacional al cual accedieron a participar los dos grandes jugadores globales, Estados Unidos y China, pese a no formar parte del bloque y de competir ambos por la influencia sobre sus integrantes. 

Ambos encuentros forman parte del capítulo bilateral y multilateral de la Argentina adentrándose en la nueva globalización pospandémica. Aunque Brasil, sin dudas, atrae el grueso de la atención por el ambicioso acuerdo de integración que los dos gobiernos prometen firmar este lunes en la Casa Rosada, en la segunda actividad oficial del día luego de la ofrenda floral de rigor en Plaza San Martín.
"Es la agenda más amplia de la que se tenga conocimiento -afirmó el embajador argentino en Brasilia, Daniel Scioli, a El Cronista-. Una apuesta a que toda esta sintonía entre los presidentes Alberto Fernández y Lula se vuelque en un programa de acción de gobiernos que los ministros deberán poner luego en práctica."

Scioli se encuentra desde fines de la semana pasada en Buenos Aires porque Lula no viene solo sino acompañado de algunos de sus ministros clave. También arribarán empresarios, ya que una de las actividades en agenda para mañana, luego del almuerzo, será un seminario en el Museo del Bicentenario que preparan Cancillería y Economía con la Unión Industrial Argentina (UIA) y su par brasileña. 

Además, si bien el acuerdo general lo sellarán ambos jefes de Estado, en los días y semanas por venir los ministros de cada país completarán los diversos capítulos en documentos de área más específicos. De hecho, Scioli estuvo con varios de ellos durante la última semana en Brasilia, antes volar a la Argentina. 

Entre otros, el embajador argentino se reunió el martes y miércoles pasado con el ministro de la Secretaría de Comunicación Social, Paulo Pimenta, el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, y el titular de la Casa Civil de Brasil, Rui Costa, en el Planalto. También se vio con el embajador Michel Arslanian y el ministro João Marcelo Galvão de Queiroz, en la sede de Itamaraty, la cancillería vecina.

Este lunes, en la Rosada acompañarán a Alberto Fernández el ministro de Economía, Sergio Massa, el canciller Santiago Cafiero y Scioli, a quienes podrían sumarse otros miembros del gabinete como Daniel Filmus y Jorge Taiana. La idea es darle volumen político a la firma con una postal a la medida.

LAS BASES DEL ACUERDO DE INTEGRACIÓN CON BRASIL

Desde el Gobierno definen el Acuerdo de Integración Argentina-Brasil como una iniciativa propia que pretende adaptar la asociación estratégica entre ambos países al nuevo contexto internacional, marcado por una etapa de repliegue de la globalización hacia las alianzas más cercanas y confiables -estrategia a la que suele referirse como re-shoring, near shoring y friend shoring-, y que busca re-significar la importancia de los bloques regionales de integración.

Al retomar su agenda de trabajo en Brasilia en tiempos de Jair Bolsonaro tras un breve paso por el Ministerio de Desarrollo Productivo, Scioli acercó un plan de 15 puntos a las autoridades de Itamaraty, la cancillería brasileña. El mismo esquema se lo presentó luego a Celso Amorim, el principal asesor internacionalista de Lula hoy. Tras la victoria del PT y su coalición el 30 de octubre, esa hoja de ruta se tomó como base y se amplió con nuevos puntos a partir del primer encuentro entre Fernández y Lula el lunes siguiente en San Pablo.

Durante las últimas semanas, el Gobierno puso candados al borrador del acuerdo que circulaba de un lado al otro de la frontera con el fin de evitar filtraciones. Lo que trascendió es que la meta es profundizar y extender la integración en todos los campos: energía, finanzas, agronegocios, industria, minería, conectividad, turismo, economía del conocimiento, defensa, derechos humanos, ambiente, educación, ciencia y tecnología y salud. En cada campo, hay políticas específicas que se perseguirán de corto, mediano y largo plazo.

En materia de integración financiera, lo que se busca es incrementar el comercio bilateral y las inversiones, profundizando la infraestructura de intercambio comercial. En cuanto al capítulo energético, la apuesta es a ampliar y reforzar la estructura de transporte con un gasoducto hasta la frontera con Brasil, un nuevo Memorándum de Energía para regular la venta de gas en verano y la compra de energía eléctrica en invierno y la venta de gas licuado del petróleo (GLP).

En el área de minería, se busca impulsar el aprovechamiento conjunto de las materias primas -litio en Argentina y otros minerales en Brasil- con el fin de desarrollar la movilidad sustentable, además de la cooperación tecnológica a través de organismos públicos y científico-técnicos y entidades privadas, de forma tal de avanzar en el desarrollo de baterías de litio e inversiones conjuntas en potasio y plantas de fertilizantes para la soberanía alimentaria regional, como así también minerales de hierro y cobre para las industrias en ambos lados de la frontera.

Tal como lo explican las diversas fuentes consultadas por El Cronista, se trata, en definitiva, de sentar las bases para el futuro de la Asociación Estratégica entre Argentina y Brasil de cara a un mundo que asoma y con un horizonte no menor a diez años. Por primera vez se piensa en una alianza que fije políticas de Estado como alguna vez fue el Mercosur, que excedan los colores partidarios y que funcione como un programa para guiar, contener e impulsar la relación bilateral clave para anclar la estabilidad política y el crecimiento económico de toda América del Sur.  

EL PROYECTO DE UNA MONEDA ÚNICA

De hecho, uno de los puntos más esperados del acuerdo será el que versa sobre la creación de una moneda única para el intercambio comercial. El proyecto va más allá de los límites de Argentina y Brasil y aspira a expandirse, eventualmente, al resto del Mercosur y la región.

 "La idea es que sea para otros países también, el objetivo de una moneda común para aumentar el intercambio comercial. Pero es un tema de mediano y largo plazo que se basa en la necesidad que tenemos todos de aumentar el comercio intermercosur y regional, a la vez que otros instrumentos de integración financiera que se están trabajando desde el área de Economía", detalló Scioli.

También habrá cuestiones relacionadas a la infraestructura, la cultura, la salud, ciencia y tecnología, posicionamientos en diversos temas internacionales, fortalecimiento del Mercosur. Incluso se apuesta a fortalecer la cooperación en el campo antártico, con una perspectiva geopolítica. Aunque sobrevolará el encuentro bilateral, la defensa de la democracia con una rotunda condena al intento de golpe de Estado ejecutado por miles de bolsonaristas tendrá un apartado en la cumbre de la CELAC.
"Es muy importante toda la gestualidad en torno a Lula: desde que haya elegido a la Argentina como su primer destino internacional -en febrero visitará Estados Unidos y en marzo a China- hasta que reingrese a Brasil de nuevo a la CELAC. Porque a partir de mitad de año nosotros le pasaremos la presidencia del Mercosur y también la India le traspasará en septiembre la responsabilidad del G20, en Nueva Delhi, por lo que Lula va a desplegar en su primer año de mandato un nivel fuerte de agenda internacional", enfatizó un hombre del Ejecutivo.

LA AGENDA DE LULA EN ARGENTINA

Lula aterrizó este domingo por la noche en la Aeroestación Militar del Aeroparque Jorge Newbery, donde fue recibido por el canciller Santiago Cafiero. Según informaron desde Cancillería, hoy lunes iniciará a las 10:30 horas su agenda oficial con la tradicional Ofrenda Floral al Libertador General San Martín, en la Plaza San Martín, frente a la Cancillería.

Acto seguido, se trasladará junto a sus ministros a la Casa de Gobierno en donde mantendrá una reunión a solas con el Presidente Alberto Fernández para luego sumarse sus ministros. La firma del acuerdo de integración tendrá lugar en el Salón Blanco, junto a los titulares de diferentes carteras. Luego habrá una declaración a la prensa por parte de los dos mandatarios para referirse a los lineamientos básicos de los acuerdos suscriptos y la declaración conjunta.

Al mediodía, ambas comitivas compartirán un almuerzo en el Salón Eva Perón y a las 15, tanto Lula como Fernández participarán de la apertura del Encuentro Empresarial en el Museo del Bicentenario. Luego recibirán a organismos de derechos humanos, entre ellas las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, a partir de las 16 aproximadamente.
Más tarde, a partir de las 19.15, los presidentes participarán en el Centro Cultural Kirchner (CCK) de una actividad cultural en conjunto, el Concierto de la Hermandad Argentino Brasileña, y se inaugurará la muestra fotográfica "Pueblos Originarios- Guerreros del Tiempo" de Ricardo Stucker, el fotógrafo que acompaña a Lula da Silva desde hace años. 

Ese será el punto final de la agenda bilateral pero no de la visita de Lula ya que formará parte también de la Cumbre de la CELAC el martes, llevando de vuelta al bloque a Brasil.

 

 

Fuente:economiay politica 

 

--

COMPARTIR:

Comentarios