Ubicada en el corazón del barrio El Sifón en San Miguel de Tucumán, la Fundación Creando Sonrisas es un claro ejemplo de cómo una iniciativa local puede transformar realidades y aportar esperanza en comunidades vulnerables. Nacida como un proyecto estudiantil, esta organización busca generar un espacio de ayuda y solidaridad para los niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad.

Luis y Agustín en La 97.1

Luis Décima, uno de los voluntarios de la fundación, explicó en La 97.1 Radio Tucumán, cómo surgió la iniciativa: "La fundación es una iniciativa creada por el colegio Gymnasium de la Universidad Nacional de Tucumán, que fue iniciada en el año 2018 en el barrio como una iniciativa estudiantil de un proyecto que presentaron los alumnos. Fue tomando forma, evolucionando y se amplió a los demás colegios de la Universidad Nacional de Tucumán. Yo, personalmente soy del técnico, hay gente de la agricultura y demás colegios. Fueron tomando más impronta y más volumen la fundación cuando accedieron al resto de las escuelas no universitarias, como la Escuela Normal y los colegios privados”, dijo Luis, al tiempo que señaló que el objetivo principal de la fundación, es ofrecer un espacio de solidaridad: "Surge como un proyecto de solidaridad, de ayuda, de buscar un espacio donde se necesite o se requiere esa ayuda”.

Agustín Flores, quien está estudiando para ser técnico en gastronomía internacional, se encarga de preparar los menús semanales. Sobre lo que cocinan, comentó: "Es muy variado. Siempre tratamos de cambiar el menú todas las semanas. Por ejemplo: guiso de fideos con carne, salpicón de ave con arroz, polenta con salsa. Este fin de semana vamos a hacer una ensalada, bastante variado. Por el calor, también tratamos de organizarnos para llevar botellas de agua, gorra, ahora en estos tiempos que hace mucho calor y hay que mantenerse hidratado para no agarrar un golpe”.

Por otro lado, Luis sostuvo que, en un día habitual, la fundación atiende entre 60 y 80 chicos: "Hoy en día, semanalmente y en un día habitual porque los días de eventos son distintos, muy distintos, aparecen muchísimos más chicos. En promedio estaríamos en 60-80 chicos, los jueves y sábado, esos son los días habituales sin un evento extraordinario. Brindamos desayuno y almuerzo el día sábado y los jueves la merienda. Los eventos especiales como el Día del Niño, Navidad, Día de la Madre y Día del Padre son ocasiones en las que la fundación realiza actividades para toda la comunidad”.

A su vez explicó: "Comúnmente todos los eventos, hablo de, el día del niño, Navidad, día de la madre, día del padre, todo lo que realizamos, si bien está destinada para toda la gente. Principalmente siempre los niños, se acercan las personas mayores se les da el su plato de comida, pero siempre concentramos en el mismo lugar donde estamos, lo cual se acercan tanto del sifón como aledaños, es un gran conglomerado de gente. Aunque por lo general, la fundación recibe a chicos de distintas edades, comúnmente se acercan de 1 a 15 años y hay gente mayor que, de vez en cuando, se acercan comúnmente, a veces incluso como voluntarios, gente de ahí del barrio. Yo de la gente del sifón, no tengo absolutamente nada que decir, impecable con nosotros”.

En charla con Alicia Herrera, conductora de “La gran mañana”, Luis manifestó que los fondos para mantener la actividad de la fundación salen de sus bolsillos. “Somos autogestinados, apolítico y apartidarios, también por donaciones privadas, muchas veces de manera anónima colaboran, ya sea por transferencia o donaciones de comida, alimentos, materiales para la escolaridad”. En relación al número de voluntarios, indicó: "Nosotros, al ser autogestionado o hacer voluntariado en sí, nunca es fijo. El número siempre va variando, pero en promedio debemos ser por intervención de 20 a 30 voluntarios”.

En tareas como estas, donde la motivación es un factor principal para poder cumplir y realizar las tareas de la mejor manera posible, ambos voluntarios cuentan sobre sus motivaciones y sentimientos encontrados dentro de la fundación. Luis, por su parte, explica: "Por mi parte, era una iniciativa que yo la seguía en Instagram, lo veía constantemente, me parecía que estaba bueno. Cuando fue el primer día, hice la intervención y cuando llegué a mi casa me senté, vi que yo tenía un plato de comida en la mesa y fue impactante. Te hace no querer irte nunca más del barrio”. Y al hablar sobre su sensación al ver realidad de los chicos. "Lo que yo siempre le digo a la gente, a vos te puede estar pasando un mal momento, te puede estar faltando algo o en algún momento no tener lo que requiera, pero hay gente que no tiene nada. ¿Sabes lo que es nada? Nada, no tiene absolutamente ni comida. Eso es impactante”.

Por otro lado, Agustín también explicó lo que lo llevó a involucrarse: "Yo más que nada tengo muchos amigos dentro de la Fundación, compañeros con los que compartí muchos años. Ver lo que hacen, ver que hacen feliz a muchos chicos con estas acciones, con simplemente ir, estar ahí y hacerlo jugar a los chicos, de sacarlos un poco de esa zona donde se encuentran. Son condiciones muy precarias donde ellos, la verdad que darle algo diferente es algo muy lindo. Yo siempre lo vi como: ¡uh, qué bueno esto que están haciendo! y ya me quise sumar. Realmente te llena el corazón, te sentís muy bien haciéndolo, ayudándolos, no importa de qué manera, pero haciéndolo ya es un gran paso”.

Para finalizar, Luis y Agustín dejaron un mensaje claro para quienes quieren sumarse. Luis manifestó: "Yo por mi parte, ya lo dije varias veces cuando me preguntan por nota y un denominador común que yo siempre veía entre la respuesta era: involucrarse. Involucrarse, sentir que tenés ganas de hacer un cambio, aunque vos sientas que no es quizás sustancial o muy fuerte, es bastante, es muchísimo. Siempre estamos abiertos, esperando los voluntarios y donaciones. Pero ese sería el mensaje, más que nada. Es algo que está sucediendo a nuestras espaldas. Algo que sucede, existe, y si no tenés ganas de verlo, eso ya es cuestión personal”.

Agustín por su parte expresó: "Hay que saber tomar conciencia de la situación en la que viven estos chicos, me costó trabajo decir: ‘bueno voy a ayudar porque quizás pasa que ni a vos mismo te podés ayudar en muchas cosas, pero es un tema de superación’. Decir: ‘realmente me animo a hacerlo’, y cuando lo hacés te cambia la vida y la manera de ver las cosas, ver gente que no vive en las mismas condiciones que vos es chocante, impactante”.

Para aquellos interesados en colaborar, la fundación tiene habilitado un alias para recibir donaciones: creandosonrisas18. Además, siempre están buscando nuevos voluntarios dispuestos a brindar su tiempo y esfuerzo para ayudar a los demás.

Mientras que, para donaciones de alimentos no perecederos, agua o proteína pueden comunicarse vía instagram: @creandosonrisas24_, también para los nteresados en participar, sumarse, colaborar de alguna manera.

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