Utilizaron un “chupete” para forzar los tambores de las motocicletas sustraídas en dos localidades. Por el robo de vehículos, el Ministerio Público Fiscal logró que se condenara a Víctor Hugo Villagrán a la pena de cuatro años de prisión de cumplimiento efectivo. A través de un juicio abreviado, la Unidad Fiscal Especializada de Robos y Hurtos I, a cargo de Diego López Ávila, consiguió las pruebas (entre ellas los videos) para encontrarlo culpable por el delito de robo agravado por el empleo de arma de fuego de operatividad no acreditada en concurso real con robo, en calidad de coautor, hechos ocurridos los días 2 y 25 de agosto del año pasado en Banda del Río Salí y en Delfín Gallo. 

En representación del titular, la auxiliar de fiscal, Fernanda Antoni Piossek, fue la encargada de recordar los ilícitos y los agravantes que se tuvieron en cuenta (la multiplicidad de hechos y el medio comisivo utilizado). “Se debe valorar el arma de fuego (no secuestrada) como circunstancia del peligro causado en relación a las víctimas que podría haber puesto en riesgo sus vidas, la cual fue exhibida (a uno de los testigos) para amedrentar”, añadió la investigadora.

 Finalmente, el juez consideró que estaban dadas todas las condiciones para declarar admisible el acuerdo pleno de juicio abreviado arribado entre las partes, con conformidad de las víctimas. 

El modus operandi  

El 2 de agosto del año pasado, siendo las 09:00 horas aproximadamente, Víctor Hugo Villagrán se encontraba como acompañante de un masculino a bordo de una motocicleta (marca y modelo Honda CG 150cc) de color negra. De acuerdo los registros y testimonios de vecinos, el acusado vestía una campera de color negra con rayas blancas a la altura de los hombros. 

En esas circunstancias, se hicieron presentes en un domicilio ubicado en el pasaje Figueroa Román de Banda del Río Salí, y previo acuerdo entre ellos y división de tareas que cada uno realizaría, Villagrán descendió del rodado e ingresó sin ejercer violencia a la propiedad y sacó una motocicleta marca y modelo Honda CG Titan de 150cc de color azul, que estaba estacionada en la galería sin su traba de seguridad colocada, mientras que su cómplice aguardaba para alertar ante cualquier situación. 

Cuando se retiraban ambos del lugar, un vecino intentó evitar que se llevarán la moto de su vecina, agachándose para tomar una piedra, momento en el que el consorte sacó de su cintura una pistola (calibre 9 mm) apuntándolo hacia su integridad, dándose luego a la fuga con el bien sustraído hasta perderse de vista.

El 25 de agosto del mismo año, a las 08:50 horas, se dirigieron al domicilio de la ciudadana víctima en el barrio Islas Malvinas en Delfín Gallo. En esos instantes, Villagrán ingresó al interior de la casa por el portón de entrada que se encontraba sin candado y le sacó del patio una motocicleta marca Honda CG Titan de 150cc, de color azul con blanco y líneas rojas, la cual se encontraba con la traba colocada por lo que la rompió, mientras que su cómplice hacía de campana esperando para que una vez cumplido su cometido se dieran a la fuga con rumbo desconocido llevándose así la moto antes descripta.

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