La mirada centralista del gobierno de Alberto Fernández puso sobre el tapete los diferentes costos para usar el transporte público de pasajeros en todo el país.

Lejos del federalismo que proclama, pero que no ejerce, al Gobierno nacional distribuye 26 mil millones de pesos por mes para el AMBA, y apenas 3500 millones para que se repartan entre los otros 22 distritos de la Argentina.

Con ese panorama, los usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires pagan 18,20 pesos por el boleto, mientras que en Río Negro se paga el boleto urbano más caro del país: 62 pesos.

Pero eso no es todo, con el acuerdo salarial de esta semana, algunos distritos avanzaron en un aumento del precio del pasaje, que profundizará las desigualdades entre el AMBA y el interior del país. En algunas provincias, los aumentos superarán el 17 por ciento, que se suman a los incrementos de principio de año.

Neuquén tiene la segunda tarifa más cara del país: 61,20 pesos.

En Formosa, acaso una de las provincias con mayor índice de pobreza, se paga 60 pesos por cada pasaje, lo mismo que en las capitales de Córdoba, Corrientes y Santa Cruz.

Muy cerca, en cuanto a costo de traslado, está Santa Fe, donde se paga 59,35 por cada vez que se sube al colectivo.

En Entre Ríos, la tarifa es de 58 pesos, aunque tiene distintas tarifas, divididas por segmentos.

En La Pampa, moverse en colectivo significa 54 pesos por viaje, seguida muy de cerca por Jujuy, que cuesta 53,60 pesos.

En Chubut y en Misiones el precio es de 50 pesos, pero en el caso de la provincia de tierra colorada, si se abona con la tarjeta SUBE, el costo baja a 30 pesos por viaje.

En Santiago del Estero y en Tucumán, el precio del pasaje es de 45 pesos; pero en El Jardín de la República, los empresarios ya presentaron una nota pidiendo llevar el precio a 155 pesos. Es tradición de los empresarios de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (AETAT) presentar un monto alto, para que se termine cerrando por un precio intermedio. La tarifa quedaría en el orden de los 75 pesos aproximadamente.

En Salta, donde el transporte público es administrado por el Estado provincial, viajar cuesta 41 pesos por trayecto. Sin embargo, en el interior de Salta, por ejemplo Tartagal, el pasaje cuesta 70 pesos.

En Chaco, donde el gobierno provincial subsidia gran parte de la tarifa, cuesta 41 pesos, para que la inflación no afecte tanto a los usuarios. En Catamarca, viajar cuesta 40 pesos.

En San Juan, el boleto cuesta 38,48. El gobernador de esa provincia, Sergio Uñac, fue uno de los primeros gobernadores en reclamar al gobierno nacional una mejor distribución de los subsidios.

En La Rioja y en Mendoza, cada trayecto cuesta 35 pesos.

En Tierra del Fuego, en Ushuaia el costo  de 24 pesos, mientras que en Río Grande, la tarifa es de 38 pesos.

Con informes de:

José Zenclussen (Santa Fe)
Juan Pablo Zone y Darío Valenzuela (Salta)
Flavia Maldi (Santiago del Estero)
Orestes Lucero (Córdoba)
Javier Schonfeld (Entre Ríos)
Orlando Ramírez (Formosa)
Fernando Dalvit y Claudia Beltramino (Río Negro)
Gustavo Cusumano (Catamarca)
Inés Casañas (Jujuy)
Germán Dittler (La Pampa)
Nicolás Díaz (Misiones)
Jorge Brizuela Cáceres (La Rioja)
Sebastián Lobello (Mendoza)
Emiliano Pascuarelli (San Luis)
Franco Paz (Santa Cruz)
Sebastián Ferrari (Tierra del Fuego)
José Luis Olave y Silvia Villanueva (Chubut)
Julián Sato (Neuquén)
Mónica Lorenzo (Chaco)
Elena Carmelich (AMBA)

Fuente: elfederalnoticias.com

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